El Beato Juan XXIII, que dio comienzo al gran Concilio
Nos parece un gran acierto y un gran Don del Espíritu, para nosotros, cristianos de a píe, poder celebrar este gozoso Año de la Fe.
Durante toda esta semana pasada hemos estado predicando en la misa diaria sobre este gran Don de Dios, La Fe.
Al final del camino de la semana llegamos a la conclusión ya anunciada y sabida: Cada día, muy especialmente cuando nos disponemos a recibir la Sagrada Comunión
El gran Papa del Concilio, SS Pablo VI
Pero este regalo que nos hace el Papa Benedicto es consecuencia de un gran acontecimiento para la Iglesia Universal
El Papa de la alegría, Juan Pablo I.
La figura del Beato Juan XXIII, cobra gran significado en esta celebración gozosa, ya que con la gracia del Espíritu Santo tuvo el valor y el coraje de proclamar y hacer realidad el Concilio, que desde el recuerdo de su bondad y santidad encaminó, para dejar el testigo al gran hombre de Iglesia, a la figura tan entrañable y brillante que fue el Papa Montini. SS Pablo VI. No es por nada que dos papas posteriores pusieran su nombre con los nombres de los Papas anteriores, Juan y Pablo.
Beato Juan Pablo II, el Papa peregrino de la Fe.
En estos tiempos que se avecinan de profundos cambios a nivel parroquial, es bueno prepararnos para lo que el Señor disponga y para lo que nosotros queramos hacer con nuestra fe y nuestra vivencia personal y comunitaria.
SS Benedicto XVI, el Papa del nuevo milenio.
Desde estás líneas nos unimos al júbilo y a la preparación de este año Jubilar decretado por el Papa para gozo de la Iglesia y para nuestro bien espiritual vivido personalmente, en familia, en la Comunidad parroquial o desde la Archicofradía del Rosario, La Congregación de Mena, la Hermandad de Dolores del Puente, la Hdad. Dela Estrella y demás grupos y asociaciones parroquiales de Santo Domingo de Málaga.
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