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| NUESTRA SEÑORA DE LAS CALDAD DE BESAYA (CANTABRIA) |
Tal
día como hoy, 15 de Junio, cuando yo tenía 17 años entré en la Orden de Predicadores, como
Postulante, en el Convento de Nuestra Señora de las Caldas, en Cantabria,
siendo Prior de este Convento el P. José Larrínaga que me recibió, y una
Comunidad entre Padres, padres estudiantes y Frailes Filósofos que pasábamos de
los 150.
Hoy
uno contempla con cierta pena y nostalgia aquel gran Convento vacío casi de frailes.
Eres
Madre de nuestros amores,
El
perfume de nuestra Montaña,
El
alivio del triste que sufre,
Virgen
Madre, salud de las Caldas.
El
Alvio del triste que sufre,
Virgen
Madre Salud de las Caldas.
A
tus plantas el río se aleja,
musitando
una tierna plegaria,
y
se postran los montes altivos,
ante
trono de Madre tan Santa.
Eres
Madre de nuestros amores,
El
perfume de nuestra Montaña,
El
alivio del triste que sufre,
Virgen
Madre, salud de las Caldas.
El
Alvio del triste que sufre,
Virgen
Madre Salud de las Caldas.
Virgen
de las Caldas, Madre nuestra, ruega por nosotros.
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