sábado, 28 de diciembre de 2013

Convento de Santa Dorotea (Agustinas Canónigas Contemplativas de Burgos)

 


Los antecedentes del Monasterio de las Agustinas se remontan a 1387, cuando doña Dorotea Rodríguez Valderrama, junto con otras devotas mujeres, creó un beatario al lado de la vieja iglesia de Santa María la Blanca, en las faldas del Castillo de Burgos. La comunidad adoptó la regla de San Agustín en 1429 con el apoyo del obispo don Pablo de Santamaría. Su aumento determinó que en 1457 las agustinas se trasladaran a la iglesia de San Andrés, hasta que en 1470 se establecieron en el lugar que hoy ocupan, en el barrio de San Pedro y San Felices. Entre los numerosos bienhechores que favorecieron el cenobio destacaron el rey Juan II de Castilla y el obispo de Almería don Juan de Ortega, quien aquí dispuso su enterramiento y el de sus familiares.

En este santo Claustro, cuando la República derribó el Convento de las Madres Calatravas, situado en el centro de la ciudad de Burgos, acogieron las Agustinas a las Calatravas. Por ese tiempo entraron mis tres tías, hermanas de mi padre, Sor Josefa, Sor Nieves y Sor Isabel, atraídas por mi tía abuela de dicho monasterio Sor Florentina. Esta última de mis tías, Sor Isabel, al conocer en el Convento de las Agustinas a las Madres Calatravas quiso entrar con ellas.

En años posteriores, acabada la guerra, en tiempos muy difíciles para toda España, el Obispado dio a las Calatravas un edificio, anteriormente había sido utilizado como seminario, junto a la Catedral, donde en condiciones muy penosas vivieron las Calatravas hasta que a finales del siglo pasado construyeron un magnífico Monasterio a las afueras de Burgos, en Villamar, donde viven, pero con la tristeza de que mi tía Sor Isabel se encuentra desde hace tiempo muy mal de salud, arropada por esa maravillosa Comunidad que la brinda ayuda y consuelo en su larga enfermedad.


Las dos hermanas Agustinas, mis tías, reposan en el interior del Monasterio, que descansan ya en la Paz del Señor al que amaron y entregar toda su vida al servicio de la oración y Contemplación, formando parte de ese gran tesoro de nuestra Iglesia que son las Monjas Contemplativas.

Hoy es el entierro de mi tía Sor Nieves. Es un profundo dolor el no estar presente, pero la distancia y las obligaciones pastorales, al estar parte de los frailes de mi Comunidad de vacaciones con sus familias -con motivo de las fiestas navideñas- se me hace imposible ausentarme de Granada.

A continuación unas fotos del Monasterio de las Madres Agustinas de Burgos:








1 comentario:

  1. Nota aclaratoria: Por lo visto ya no entierran a las Madres Agustinas dentro del Monastario, como fue el caso de mi tía Sor Josefa, a mi tía Sor Nieves la enterraron -según me informaron ahora- en un panteón en el cementerio de la ciudad de Burgos.

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